Uno de mis “hobbies” favoritos es la carpintería. De
niño veía a mi padre laborar rusticas piezas de madera hasta convertirlas en
muebles. El viejo Grillo no era carpintero, pero tenía una habilidad innata
para realizar cualquier tipo de labor. Yo siempre intento parecerme a él. Es mi
mejor tributo. No dibujo nada, una vez que tengo la idea, procedo a fabricarla.
Recurrentemente llega a mi memoria una frase que le escuché muchas veces a mi
padre. Frase de un valor incalculable y por la cual le estoy eternamente
agradecido. No importaba lo peligroso del trabajo, o del equipo que estuviese operando,
aquel viejo con la camisa empapada de sudor, empanizado en aserrín o tierra
colorada, invariablemente detenía la faena pare decirme, “Venga, acérquese para
que aprenda.” ¡Gracias por eso José Miguel Grillo!
aprendio muy bien,,,,, y creo q hasta lo va superando, tambien tiene la ayuda de instrumentacion mas moderna, etc. pero la realidad es q lo q bien se enseña, bien se queda. lindo eso de ser agradecido... y lindo haber tenido un padre asi !
ReplyDeleteEl mejor legado que uno le puede dejar a un hijo, es educacion, y no hablo de la academica, sino la de la vida. Esa que agranda el espiritu y te hace rico, para siempre.
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